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periodico 127

2 I PERFIL EL SECTOR • Enero 2016 José Vicente Morata PRESIDENTE DE LA CÁMARA DE COMERCIO DE VALENCIA “Nos abrimos a un escenario totalmente distinto” ¿Cuál es la representatividad actual, después del periodo que hemos pasado, del sector del mueble y la madera en la economía valenciana? El sector del mueble y la madera es intrínseco a nuestra economía. Tiene una presencia muy notoria, quizá hoy en día no tanto en cuanto a volumen, pues ha habido otros sectores que han crecido significativamente, pero sigue teniendo un peso importante, sobretodo, como tractor de exportaciones. ¿Cómo han evolucionado nuestras exportaciones y la internacionalización de las empresas? Las exportaciones están evolucionando de una forma magnífica. En estos momentos estamos creciendo el triple de lo que han crecido las exportaciones españolas, fundamentalmente en países que no son del área de Europa, países emergentes en los que estamos actuando de una forma cada vez más significativa. Si me remito al mueble, en el África subsahariana está teniendo una presencia cada vez más importante y vuelve a retomar los países del Golfo y EEUU, que son mercados muy interesantes por su poder adquisitivo. ¿Podríamos hablar entonces de una recuperación económica en el sector? Se puede hablar de una recuperación, pero de forma diferente. La recuperación no es para todos, sino para aquellos que hayan hecho lo que debe hacer una empresa hoy, como trabajar la innovación, no dejar los mercados exteriores y tener una política de recursos humanos que mantenga un clima social donde la gente esté involucrada. Sí que hay empresas que están internacionalizadas, manteniendo una posición en el mercado interno importante y donde realmente empieza a verse que hay una recuperación. Nos abrimos entonces a un escenario distinto al que conocíamos previo a la crisis. ¿Cuáles son los retos para las empresas en este nuevo escenario? Efectivamente, el escenario es totalmente diferente, porque las tendencias de consumo han cambiado. Hace años incluimos la prevención de riesgos en la gestión diaria de la empresa, luego fueron los temas medioambientales y ahora es el compromiso social. Los nuevos consumidores, sobretodo la gente más joven, quieren que la empresa sea parte de la sociedad. Y son estas AROMA DE MADERA RECIÉN CORTADA empresas las que realmente triunfan, porque están desarrollando en su gestión, además de la innovación y de las nuevas formas de gestión del trabajo, ese compromiso con la sociedad cada vez más valorado por los consumidores. ¿Y cómo se materializa ese compromiso con la sociedad? Lo estamos viendo. Siempre son las grandes empresas las que lo inician: apoyo universitario, ayuda a colectivos desfavorecidos, financiación de actividades deportivas… Hay muchas actividades que las empresas pueden emprender como forma de ayuda a la sociedad, no hace falta que sean grandes proyectos, pueden ser pequeñas aportaciones. Otro de los temas importantes es la no discriminación de género. En Cámara de Comercio vamos a informar a las empresas del “he for she”, una campaña sobre la importancia de la no discriminación y la importante aportación que realizan las mujeres a la economía y a nuestras empresas. ¿Qué otros aspectos muestran una valoración positiva en las tendencias de consumo? El low cost. El consumidor busca un precio económico, fundamentalmente porque la renta disponible ha caído, pero además quiere diseño, y da por hecho que el producto tiene calidad, que va a funcionar. Todo es más funcional, menos duradero, priman la estética y el precio. Y lo quieren rápido, la logística también es fundamental. Es usted presidente de Honor de IVEFA, en nuestro sector la empresa familiar tiene gran importancia. ¿Cuál es la mejor baza de la empresa familiar? ¿Y su peor enemigo? Conozco profundamente la empresa familiar. La vivo y la he vivido, mi empresa va a cumplir 120 años, somos la cuarta generación en Puertas Morata. La mayor ventaja es la implicación, el sentimiento de pertenencia, la identificación con la empresa, tanto de los propietarios como de los trabajadores, que en muchos casos también son segunda o tercera generación, y de los mismos clientes, que ven como garantía una trayectoria larga y familiar. El principal inconveniente es la sucesión. Y precisamente, ese es el trabajo que IVEFA desarrolla de forma excepcional, el apoyo a que la sucesión sea de la forma más sencilla. Uno de sus objetivos al ser elegido presidente era el acercamiento de la Cámara a las empresas. ¿Lo ha conseguido? En Cámara, como en cualquier organización, los resultados son trabajo de todo el personal. Los datos están ahí, en 2015, más de 10.000 personas han pasado por cursos de formación y seminarios; en internacional, hay una auténtica barbaridad de actividad diaria; hemos cuantificado este año en torno a 210.000 relaciones con empresas… Se ha recuperado esa visión de que la Cámara puede aportar valor a las empresas y las empresas han vuelto a la Cámara. Pero todo ha sido gracias al trabajo del personal de Cámara. Las empresas somos personas, las organizaciones somos personas y la motivación es lo que hace que las empresas funcionen. Hemos pasado años complicados donde en muchos casos ha primado la situación financiera. Pero eso ha pasado. Ahora tenemos que hablar de futuro, de posición en el exterior, de orientación al cliente y de valor añadido. El fin de Cámara es hacer fácil lo difícil y su objetivo es ayudar a las pymes, no tiene otro. Presidente de la Cámara de Comercio, Industria y Navegación de Valencia, presidente del Consejo de Cámaras de la Comunidad Valenciana, miembro del Comité Ejecutivo de Cámara de España, presidente de honor de IVEFA (Instituto Valenciano para el Estudio de la Empresa Familiar), vicepresidente de la Asociación Valenciana de Empresarios de Carpintería y Afines, vicepresidente de Turismo Valencia, presidente del patronato de la Lonja de Valencia, cónsul de Estonia en Valencia y administrador de Puertas Morata, la empresa familiar de la que emerge un recuerdo adolescente del aprendiz que fue: el olor a madera recién cortada en el taller. Es José Vicente Morata, un empresario de discurso firme y afable, que afirma “no hacer más que lo que hace cualquier empresario: levantarme muy pronto por la mañana y acostarme muy tarde por la noche, seis días a la semana” para poder compaginar toda su actividad. “Tengo la suerte de tener un gran equipo a mi lado, que es capaz de organizarme una agenda realmente complicada. Pero las cosas con ilusión se pueden llevar perfectamente”. Y ese séptimo día de descanso, le gusta disfrutarlo con su mujer, familia y amigos “y pescar en el mar, lo único que me hace desconectar de verdad”


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